Por lo general las personas están atentas a los signos de alerta que sus vehículos presentan con el fin de realizar los ajustes o reparaciones que sean necesarios. Sin embargo, unas partes de su automóvil a las que usualmente se les prestan poca atención a pesar de su indispensable función son las llantas. Según un estudio realizado en el año 2010 por Michelin (Brasil) el 45 % de los conductores de ese país transita con la presión de sus llantas por fuera de los límites aconsejados. De la misma manera, ese mismo año, el reconocido fabricante de neumáticos Bridgestone realizó un estudio en 9 países europeos a través del cual determinó que el que el 71% de los conductores circulan con neumáticos con baja presión.
Podría decirse que las llantas actúan como los zapatos de su vehículo, por lo tanto, reciben un desgaste considerable. Los neumáticos de su vehículo deben mantenerse en buenas condiciones y con la presión correcta, contribuyendo así a mejorar el desempeño de su automóvil y a evitar peligrosos accidentes.
¿Cuáles son los riesgos?
Mantener las llantas de su vehículo con la presión por debajo de lo recomendado le puede ocasionar, entre otros, los siguientes problemas:
- Incrementar considerablemente el riesgo de sufrir un accidente por explosión.
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Aumenta el consumo de combustible
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Reduce la vida útil del neumático
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Afecta peligrosamente la dirigibilidad de su vehículo; es decir, disminuye la precisión de la dirección.
Por otro lado, la presión alta en sus llantas también puede causar riesgos para su seguridad tales como:
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Poca adherencia del neumático a la superficie de la carretera.
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Desgaste prematuro de la suspensión de su automóvil.
Del mismo modo, el estado de las llantas de su automóvil puede repercutir en la expedición de su seguro todo riesgo para vehículo, ya que la revisión del estado y el desgaste de las mismas es uno de los aspectos indispensables que se tienen en cuenta en la inspección que determinará si su vehículo es asegurable.
Evite estas complicaciones de una manera muy sencilla: calibre la presión de sus llantas por lo menos cada 15 días y de manera obligatoria antes de salir a viajar. Esto, además de reducir los riegos mencionados, muchas veces ayudará a alargar la vida de las misas. No olvide que su llanta de repuesto también debe permanecer en condiciones óptimas, ya que esta le puede ayudar en caso de algún accidente en carretera. Los niveles adecuados de presión para las llantas de su auto normalmente se pueden encontrar en la puerta del conductor o en el manual del vehículo. En caso de que usted no cuente con este documento, puede acercarse a un centro especializado en este tipo de servicios y permitir que sean los expertos quienes se encarguen de dejar sus llantas en el estado ideal.